Es un recurso pedagógico que facilita la educación afectivo-sexual desde la educación del carácter, trabajando cinco pilares de la educación del carácter: educación del carácter intelectual, educación del carácter moral, educación del carácter ejecutivo (performance), alfabetización afectiva y educación del carácter social.
El programa se enfoca a los seis niveles de la educación primaria. Tiene libros para alumnos, para docentes y para padres.
Los contenidos se adaptan a la realidad del estudiante, presentando historias y experiencias humanas, cercanas y motivadoras que llevan al diálogo.
Abarcando todas las dimensiones de la persona: biológica, psicológica, espiritual y social, los contenidos se trabajan a nivel cognitivo (cabeza), afectivo (corazón) y conductual/operativo (manos).
Escuelas y para el uso de los padres y madres de familia en sus propias casas.
Alumnos
Padres
España y Guatemala
Este material se fundamenta en la Pedagogía de la Integración de la Persona Humana, a la que considera un ser con cuatro dimensiones estrechamente relacionadas: biológica, psicológica, espiritual y social.
En el siguiente esquema se presentan las cuatro dimensiones de la persona y los principales Temas que abarca cada una de ellas:
La Pedagogía de la Integración de la Persona Humana aporta una visión global del ser humano, dirigiendo el proceso de enseñanza-aprendizaje hacia una gran meta: conseguir en los alumnos una mayor integración de las diferentes dimensiones, es decir, una mayor armonía interior que se proyecta en su forma de actuar. En este contexto, el hecho sexual está evidentemente incorporado de manera natural y la mencionada integración o armonía interior es el mejor camino para desarrollar una sexualidad sana en el futuro.
El contenido de cada nivel se distribuye en Temas. En cada uno se desarrolla una de las dimensiones de la persona, si bien puede haber en cada nivel más de un Tema dedicado a la misma dimensión (dos o tres de lo biológico o de lo psicológico, etc.). La división en Temas tiene una función exclusivamente didáctica, dado que resultaría inapropiado contemplar a la persona como un conjunto de “cuartos separados”. En la realidad, los elementos de cada dimensión interactúan entre sí y de ahí que en los Temas, a su vez, aparezcan mezclados.
Cada Tema se compone de tres partes siguiendo una lógica ya bastante consolidada en la pedagogía del carácter: explicar un punto en concreto, generar entonces actitudes positivas en los alumnos y, finalmente, llevarlo todo, de alguna manera, a la acción (en el aula y proyectado hacia el propio hogar y la sociedad).
Cada Tema tiene una pequeña sección final de repaso donde, en frases cortas, se resume lo visto o planteado durante el mismo.